EL “DAR”

Al comprobar que la Residencia estaba organizada por departamentos, me pareció conveniente organizar esta atención desde un departamento, dando así origen al acróstico “DAR” -Departamento de Atención Religiosa-. Como otros departamentos o áreas de la Residencia, tiene su propia entidad, funciones, responsables, protocolos, actividades,… 

La finalidad de este servicio es la de acompañar y sostener a los mayores en su condición humana y creyente, cuidando la vivencia y celebración de su fe, de modo que ésta ayude a afrontar de modo positivo y saludable las pérdidas, el dolor y la misma muerte. En definitiva, aspiramos a ayudarles a culminar su vida, coronando su trayectoria vital con agradecimiento, paz y mirando al futuro con esperanza. Estamos convencidos que la fe y la vivencia religiosa pueden aportar la fuerza humanizadora que tienen los valores del Evangelio: compasión, respeto, ayuda mutua, solidaridad, reconciliación… Dicha atención también va dirigida a familiares y trabajadores, en la medida en que están relacionados con los residentes y forman parte de la Residencia.